Me
preguntaron porque iba cada martes a la cafetería de siempre,
por que me sentaba en la misma silla al lado de la gran ventana de cristal, porque ponía cara de nostalgia
,porque hacia con la servilleta un pájaro de papel, me gusta ver a la gente por la ventana de cristal, empañada por la lluvia, me encantaba ir cada martes contigo reír
sobre cosas que nos hacían
reir solo a
nostros, nuestros paseos en en coche, cantando con la música
tope , no podía oírme ni a mi ni a
ti , mirre hacia el lado te veía cantar
aun que sin apenas oírte, todo era extraño, nuestra amistad era extraña, sin embargo nunca me sentí tan viva, era tan extraño no tenerte a mi lado, todo
ahora solo exsistía en mis pensamientos algo llamado recuerdos. Al final
me límite a decir:-Antesla silla de enfrente no
estaba vacia,-Quien la ocupaba?-
me límite a hacer una mueca de dolor y me fui de la cafeteria.